Por: Helga Glaesel

Para Mundo de Mamá

En mi nota anterior, les compartí algunos consejos para saber cuando los bebés están listos para probar alimentos sólidos. Ahora les comparto mis métodos para cocinar y almacenar compotas o purés hechos en casa, las cuales no solo tienen el beneficio de ser realmente 100% naturales, sino que son de beneficio para nuestras billeteras.

Es más fácil de lo que te imaginas, y con un día a la semana que le dediques un poco de tiempo, tendrás lo que necesitas para toda la semana. Para tener tus raciones de compotas caseras, además de frutas y vegetales frescos, necesitarás bandejas para hacer hielo. Compra al menos 6.

Método:

1. Comienza por cocinar el o los vegetales, o la(s) frutas. El método que les sugiero, es al vapor. De este modo se retiene la mayor cantidad de nutrientes.

2. Una vez bien cocido el alimento, transfiérelo ya sea a una licuadora o a un procesador de alimentos. Procésalo bien hasta que quede suave y sin grumos.

3. Reserva los líquidos que hayan quedado para incorporar al puré, si se procesa solamente la verdura cocida quedara demasiado espeso. Agrega el líquido necesario y sigue procesando hasta llegar a una consistencia ideal. Ojo: No reserves el liquido en donde se han cocido zanahorias, ya que el agua queda alta en nitratos.

4. Una vez tengas la consistencia deseada, transfiere el puré a bandejas para hielo. (Llena cada compartimento como lo harías para hacer hielo.) Tápalo con film plástico, y mételo al congelador.

5. Cuando estén congeladas, remueve los cubitos de las bandejas y transfiérelos a bolsas tipo ziploc. Es importante que marques cada bolsa con el nombre de la verdura o fruta y la fecha en que lo preparaste.

6. Cada cubito equivale a 1 oz de alimento, así que es fácil calcular las porciones de tu bebé de este modo.

7. Mas adelante, puedes hacer lo mismo incorporando pechugas de pollo cocidas y carne de res magra licuadas.

8. Para descongelar, puedes usar una pequeña olla agregando cubitos de un solo sabor, o mezclando con otros que tengas preparados. Claro, puedes usar el microondas también, pero yo en lo personal prefiero usar la estufa.

 

Tips adicionales:

  •  A la hora de descongelar los cubitos, puedes agregar un poco de fórmula o leche materna para diluir los purés si los sientes muy espesos. (No agregues la leche para luego congelar los purés, ya que se altera la composición de la misma al ser congelada)
  • Conforme vayas avanzando en la variedad de purés que vayas introduciéndole a tu bebé, no tengas miedo de mezclar! Por ejemplo, camote con manzana. Zanahorias, papas y güicoyitos. En algún momento, yo le preparé a mi hija un puré de peras con manzanilla y arroz.
  • En cuanto a almacenaje, es recomendado que los purés no permanezcan en la refrigeradora por más de 48 horas, y en el congelador por más de un mes.
  • Recuerda de no agregar ni sal, ni azúcar a los purés. Conforme el bebé avance con su dieta, puedes agregar hierbas y algunas especias previo a autorizacion de tu pediatra.

En mis próximas notas les estaré compartiendo recetas para que sus bebés no se queden atrás en lo que es uno de los placeres de la vida… ¡comer rico!

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