Te compartimos una serie de señales para que consideres antes de ponerlo a entrenar para dejar sus pañales:

  1. Tu bebé permanece seco durante algunas horas. “Esto demuestra que el esfínter se puede retener la orina en la vejiga”, una habilidad muscular necesaria para hacer pipí cuando tu pequeño quiera, dice Mark Wolraich, MD, autor de The American Academy of Pediatrics Guide to Toilet Training (Bantam). La mayoría de los niños están listos alrededor de los 2 años.
  2. Cuando te alerta que su pañal está sucio. Esto es importante por dos razones: (1) tu hijo es consciente de lo que está pasando ahí abajo, y (2) es capaz de comunicarse.
  3. Tu pequeño muestra curiosidad por el cuarto de baño. Tu hijo muestra interés y curiosidad al ver a miembros de la familia, amigos en la guardería o en el preescolar acercarse al baño, como una forma de prepararse.
  4. Tiene habilidad o facilidad para subir y bajar sus pantalones y ropa interior. Si necesita mucha ayuda de parte tuya, puede que no esté preparado. Los pantalones de cintura elástica les facilitan aprender a subir y bajárselos.
  5. Cuando muestran indicios de independencia. Tu hijo es más propenso a usar el baño cuando decide que quiere ser un niño grande y hacer las cosas él mismo.
  6. La anticipación y la conciencia. El reto final es cuando el niño puede reconocer que está a punto de ir al baño. “Lo que la mayoría de nosotros definimos como “entrenado o preparado” es cuando un niño está consciente de que tiene que ir al baño, indica que es necesario, y luego lo hace, dice el Dr. Wolraich. Para muchos niños, esto se manifiesta alrededor de los 3 años.

Así que por estas pautas podrás ver si está o no preparado para ser entrenado para ir al baño solo.

Vía: American Baby

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